domingo, 30 de mayo de 2010

A propósito de Chippendales (2)

Este espectáculo parece que ha llegado a nuestro país en una época en donde parece ser que ya está maduro para recibirlo públicamente. Estos eventos son situaciones que se han estado dando por mucho tiempo en casas de familias de nuestra sociedad, ya no solamente en aquellos lugares restringidos y bien señalados de la ciudad.

Lo que pasa es que ya los estamos importando desde Las Vegas, la ciudad del pecado, como se le llama comúnmente.

Digo que son eventos que se han estado dando en nuestra sociedad, y en las clases más altas y media alta de la misma, con una frecuencia cada vez más asombrosa. Conozco de dos casos en donde se le hicieron sendas despedidas de solteras a ambas jóvenes con unos Strippers dominicanos.

En uno de esos eventos mi hija y su abuela tuvieron que retirarse del mismo con la indignidad y la falta de respeto que implicaba, pues nunca se avisó de que algo así sucedería. Lo grande del caso es que el mismo se realizaba en una casa de un familiar nuestro, familiar que conoce nuestra formación cristiana y que sin ton ni son tuvo el tupé de invitarnos.

Lo asocié con Disney, porque así parece la promoción del espectáculo a los ojos de los más simples, lo asocié con Disney por la similitud fonética con los nombres de las ardillitas, y porque cualquiera que haya ido a Disney, eso era lo primero que le iba a venir a la mente.

Pero la asociación real y verdadera es por el grado de perversión y corrupción a que ha llegado nuestra sociedad, y que sé que seguirá avanzando a peores estadios de aberraciones. Al grado de tolerancia corrupta a la que las familias están llegando.

¿Dígame usted, qué hace una mamá y un papá haciéndole una despedida de soltera a su hija con unos strippers?

Lo más grande del caso es que en las familias que cité anteriormente se denominan cristianas.

¿Adúlteros, fornicarios, perversos y pervertidores, padres e hijos y quienes consienten tales cosas, creen ustedes que el Dios creador de los cielos y la tierra, ese Dios vivo y verdadero, Santo y Justo, los cree a ustedes cristianos? Jamás.

¿Quieren saber ustedes quien es su dios? el diablo.

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