Los últimos tiempos de la historia de la humanidad se iniciaron con el nacimiento de la era cristiana. Cuando Juan el Bautista presentaba a Jesús, lo anunciaba diciendo: “arrepentíos, porque el reino de Dios se ha acercado.”
Y es que conjuntamente con el reino de Dios, encarnado por Jesucristo en esos momentos, también se inicio el final de la historia de la humanidad. Muchas profecías fueron dichas y todas se cumplieron, otras están en la espera de su cumplimiento.
De todo lo profetizado y que todavía falta por cumplirse tenemos, y conocemos con certeza absoluta los siguientes eventos:
1. El regreso de Jesucristo en gloria. Su segunda venida.
2. No conocemos ni el día ni la hora que la segunda venida sucederá.
3. La historia de la humanidad como la conocemos hasta ahora terminará.
4. Habrá juicio para todo ser humano que haya existido (pues habrá resurrección de los muertos) y para los que estén en vida también.
5. El juicio será para salvación eterna y para condenación eterna.
6. Los cielos y la tierra, así como la fisionomía y estructura de la nueva vida de los humanos serán diferentes a como los conocemos hoy en día.
7. Tampoco sabemos por cuales países comenzará lo que se conoce como la unión de naciones que se realizará para luchar contra Jesús.
8. No conocemos de donde saldrá el anticristo, ni su país, ni su nacionalidad, ni si será un sistema o una persona física o los dos a la vez.
9. Sabemos con certeza que los cielos y la tierra pasarán, pero que la Palabra de Dios, no pasará. Que todo lo profetizado en la Biblia se cumplirá.
Hay otros eventos que por causa de espacio no los podremos citar; pero el asunto está en que sabemos con certeza absoluta que todos ocurrirán y que otros que sabemos que ocurrirán, no tenemos esa certeza absoluta en cuanto al tiempo en que sucederán.
Uno de esos eventos es el fin de lo que hoy conocemos como “El Mundo”, el fin de la historia de la humanidad, incluyendo los cielos y la tierra que nos alberga. Es cierto, sucederá, habrán cielos nuevos y tierra nueva, así lo prometió El Señor, pero, ¿cuándo acontecerá?, ni a los seres humanos ni a los ángeles nos ha sido revelado. Veamos:
Mateo 24: 36 “Pero el día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los Cielos, sino solo mi Padre.
Pero realmente, ¿tiene importancia el día y la hora en que el mundo se acabará? Claro que la tiene, es de tanta importancia que solo El Padre conoce dicho asunto. Pero, ¿cuál es el significado entonces para nosotros? El significado está en el propio evento, y en lo que sucederá; Jesús viene, y hay que estar preparado para ese encuentro personal que tendrá con cada ser humano.
Es más importante para Dios y para los hombres que nos encontremos preparados para ese día, sea cuando fuere y a la hora que fuere.
La atracción que experimenta el ser humano por las profecías, por conocer el futuro, por poseer conocimientos exclusivos, los ciega de la verdadera importancia de las cosas. El mundo se puede acabar mañana para el que muere, mas sin embargo, no nos preparamos para tal eventualidad, ni nos asombramos, ni nos perturbamos que así fuere, ni cambiamos de conducta con respecto a Dios como debiera. Entonces, ¿cuál es el sensacionalismo con las predicciones de los mayas de que el mundo se acabara en el 2012?
Los mayas, Nostradamus u otros “profetas” contemporáneos pueden predecir el fin del mundo pero, la Palabra de Dios dice con toda certeza que nadie sabe ni el día ni la hora de tal acontecimiento. Pero algo interesante es que en lo más profundo de su ser, el ser humano sabe que la historia tendrá su fin, y esto desde el inicio de la misma humanidad.
Si el mundo se le acabara a usted mañana, o en unos minutos, ¿está usted preparado para lo que con verdad absoluta le sucederá? Veamos algunos versículos Bíblicos que nos hablan de lo que pasara después de que se acabe el mundo, ya sea que usted se muera o que venga Jesucristo:
1. Hechos 9:27 “…Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez y después de esto el juicio”.
2. Hebreos 4:13 “Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuentas”.
3. 2da Corintios 5:10 “Porque es necesario que todos comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo”.
4. Romanos 14:10b, 11, 12 “…Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. Porque escrito esta: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y toda lengua confesara a Dios”.
5. Filipenses 2:9 al 10 “Por lo cual Dios también lo exalto hasta lo sumo, y le dio un nombre sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre”.
6. Apocalipsis 20:11 al 15 “Y vi un gran trono blanco…Y los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos…Y fueron juzgados los muertos, cada uno según sus obras…Y el que no se hallo inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego”.
Si después de leer todos estos versículos que tratan con los eventos futuros, especialmente con la terminación de la historia del mundo te preguntase como lo hicieron las personas que oyeron el discurso del Apóstol Pedro narrado en el libro de los Hechos, te contestaría con la misma respuesta, cito:
Hechos 2:37, 38 “Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo, para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo”.
Hechos 17:30,31 “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgara al mundo con justicia, por aquel varón a quien designo, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos”.